Niños desarrollan videojuego que ayuda a reciclar botellas
Seis niños de entre 9 a 13 años, y en tan sólo 48 horas, desarrollaron el videojuego “Reparing the World” (Reparando el mundo), que busca enseñar a reciclar las botellas de plástico y disminuir la contaminación. Por ello, crearon una consola que habilita el juego sólo si se introduce una botella de plástico.
El equipo, denominado MakerKids, participó en Cochabamba del Global Game Jam (GGJ), evento mundial que se realiza simultáneamente en unas 800 sedes de unos 100 países, cuyo objetivo es desarrollar un videojuego en 48 horas y compartir con los amantes de los juegos. La temática de este año fue reparar.
En Cochabamba, durante el GGJ participaron más de 70 personas —de entre 9 y 46 años— y se desarrollaron 13 videojuegos. “Por primera vez, uno de los juegos contó con un mando no convencional que fue realizado por los participantes más jóvenes del evento”, explicó René Fernández, director del Departamento Académico de Sistemas y Tecnología Informática de la Universidad del Valle.
Del juego
Elyn Mamani, Saúl Estrada, Arham Escóbar, Enya Tordoya, Jarys García y Emir Mamani, junto a su tutor Edgar Mamani, conforman el equipo MakerKids.
Todos los niños son alumnos del centro de robótica educativa Mi Maker House y, para el GGJ, el tutor y docente de ese centro seleccionó a los mejores de 12 postulantes y los organizó para desarrollar tareas específicas.
Todos los niños coincidieron en que fue una gran experiencia, en la cual desarrollaron su imaginación, pero que el tiempo fue una limitante para avanzar más en el videojuego.
Así, tomando en cuenta la temática reparar, los participantes pensaron en la contaminación en el mundo que se tiene principalmente por el plástico.
Por ello, el videojuego “Reparing the World” tiene la parte de software (programas) y hardware (elementos físicos) .
“Los niños pueden y deben aprender desde pequeños a reciclar. Por ello, se nos ocurrió este juego, unir los videojuegos con el reciclaje de botellas de plástico”, dice Elyn, de 10 años, quien fue la líder del equipo y anteriormente desarrolló proyectos en cuidado del medio ambiente como “My Plant”, una aplicación que mide la humedad de la tierra de las macetas.
Los integrantes de “Reparing the World” desarrollaron la parte del software en el lenguaje de bloques MakeCode de Microsoft y crearon un personaje principal: ReparBot, un robot que llega del espacio a la Tierra para terminar con la basura, la recolecta y la recicla. Además, pelea contra los villanos (estos últimos no fueron desarrollarlos por falta de tiempo).
Saúl y Arham, ambos de 13 años, se encargaron de la programación del videojuego.
“Lo bonito de crear un videojuego es que activas tu imaginación”, dice Saúl, quien explica que una de sus pasiones y pasatiempos favoritos son los videojuegos. Más adelante espera tener una empresa para crear videojuegos.
“Me siento feliz y orgulloso de haber participado en este videojuego”, acota Arham.
La parte del diseño estuvo a cargo de Jarys y Enya. “Me gusta diseñar. Es muy lindo ver cómo se forma el dibujito y en especial en píxeles porque es mucho más difícil hacer”, explica Jarys quien diseñó a ReparBot.
“Hasta el más pequeño puede sorprender a todos”, dice la niña más pequeña del grupo, de 9 años.
Por su parte, Enya se encargó de la cinemática y los escenarios. “La cinemática es una secuencia de imágenes que uno cambia con un botón y que cuentan la historia del juego”, explica la niña de 12 años, a quien le gusta dibujar desde pequeña.
Aunque le gusta el diseño, Enya explica que también le interesa la programación y seguirá aprendiendo sobre ello.
La otra parte del videojuego —el hardware— es la consola artesanal que desarrollaron, como el mando de los juegos de Nintendo.
Emir se encargó de la estructura, de soldar los joysticks, la palanca y los botones. Elyn se ocupó de la parte de la programación de la electrónica de la consola que cuenta con una placa Raspberry PI Zero, que tiene un sensor que detecta el ingreso de la botella de plástico e inmediatamente habilita los controles para jugar desde la consola.
Por ello, sólo se necesita la consola y una pantalla (con puerto HDMI de televisor o proyector) para jugar, pues el videojuego se copia a la memoria de la consola.
El tutor, Edgar, expresa que se sintió muy satisfecho con el trabajo que desarrollaron los integrantes de MakerKids, pues “tienen muchas ganas, paciencia y disciplina; factores importantes para realizar este tipo de proyectos”.
EN BOLIVIA
En Bolivia, el Global Game Jam 2020 se realizó en Cochabamba, La Paz y Santa Cruz. En Cochabamba participaron más de 70 personas, de entre 9 y 46 años, y fue realizado en instalaciones de la Universidad del Valle (Univalle).