Día Internacional del Té: un deleite milenario
El té ha cautivado a la humanidad durante siglos con sus innumerables variedades, sabores y beneficios para la salud. Hoy, 21 de mayo, se celebra el Día Internacional del Té, una ocasión especial para honrar una de las bebidas más populares y apreciadas en diferentes culturas.
Según la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), la fecha promueve y fomenta medidas colectivas dirigidas a llevar a cabo actividades en favor de la producción y el consumo sostenible de té, busca ayudar a los pequeños productores de los principales países exportadores de té y aumenta la conciencia acerca de su importancia en la lucha contra el hambre y la pobreza.
Una de las cosas más fascinantes del té es la amplia gama de variedades disponibles. Desde el delicado té blanco hasta el robusto té negro, cada tipo ofrece una experiencia única, señala la catadora de té Mariana Pedraza, gerente general de la Hacienda Huayllani.
“Cada variedad tiene sus propias características de sabor, aroma y método de preparación, lo que permite a los amantes del té explorar y descubrir nuevos sabores”, indica. Señala que los factores que influyen para catar adecuadamente el té son la calidad de la hoja, la cantidad del té, la calidad y cantidad del agua, ls temperatura del agua, el tiempo de infusión y el material del recipiente, según la ISO 3103.
“Cuando hablamos específicamente de una cata, calificamos la variedad de té. Si es un té negro lo calificamos como tal, es decir, que no se puede mezclar con té blanco”, explica la también especialista en Wulong y té azul. Existen seis variedades de té: blanco (BaiCha), verdes (LuCha), amarillo (HuangCha), azul (QingCha), rojo (HongCha, conocido en occidente como té negro) y Heicha (té oscuro posfermentado).
Además de ser delicioso, el té también ofrece numerosos beneficios para la salud: contiene antioxidantes que pueden ayudar a proteger el cuerpo contra el daño celular, fortalecer el sistema inmunológico y contribuir a la salud cardiovascular.
MANERAS DE APROVECHAR AL MÁXIMO SU SABOR Y AROMA
El té se deriva de las hojas y brotes de la planta Camellia sinensis, y hay más de tres mil variedades conocidas en el mundo.
Pedraza, quien también lleva el título de sommelier, explica que existen dos formas de realizar una buena cata: la escalonada, que varía entre uno, tres y cinco minutos, y la directa de seis minutos con agua hirviendo (un gramo por cada 50 ml de agua).
“Hay que darle tiempo a la hebra para que poco a poco se vaya a despertando”, dice.
En cambio, si uno desea degustar un té, ya sea que tenga mezcla o que no, se debe respetar lo que el sommelier haya decidido. Éste se encarga de determinar y poner en el paquete o blend (hebra más otras especias) a cuántos minutos se tiene que infusionar, a qué temperatura de agua, etc.
Además, si se trata de un té en bolsa, que es picado y lleva un protocolo de cosecha diferente, el error más común es dejarlo sopado en el agua bastante tiempo. Si esto sucede, la hebra empieza a desprender su aroma y sabores de golpe y el sabor se vuelve amargo y ácido. Lo que Pedraza sugiere es soparlo y dejarlo muy poco tiempo.
De cualquier manera, si el deseo es comenzar a explorar el mundo del té, Pedraza aconseja que “se anime a probar todo, dependiendo el lugar dónde vive y cuáles son sus costumbres. Muchas veces no tenemos acceso a ciertos productos y dependiendo de este factor, la idea es probar de todo y así descubrir qué té en bolsita o en hebra nos gusta”.
Y los lugares para hacerlo, en Cochabamba, no faltan. Está Huayllani la Hacienda del Té, Creatio, Lutetia, Tecito, Camellia by Typica, entre otros, que ofrecen una amplia variedad de tés y para todos los gustos.
Estos salones de té ofrecen, además, un ambiente acogedor y relajado, con una decoración encantadora que invita a sumergirse en la experiencia. Por lo general, se encuentran mesas delicadamente decoradas con manteles y vajilla elegante, lo que crea un ambiente especial para disfrutar de una taza de té caliente.
En Huayllani, ofrecen más de 120 variedades de tés, uno de los favoritos es Noche en París que lleva frutos rojos, té negro y lavanda. Con el objetivo de culturizar al cliente, este salón lleva adelante, desde hace un tiempo, la ruta del té y también catas de té.
TÉ CHAPARE, EL SEGUNDO MEJOR TÉ VERDE DE LATINOAMÉRICA
Bolivia participó en la segunda edición de la Competencia de Tés Artesanales Argentina – Sudamérica con una muestra del Té Chapare. Los resultados arrojan una buena noticia: la infusión se llevó el segundo lugar en el certamen. Es decir, es el segundo favorito de una gran variedad de tés presentados por 13 países.
“Hemos llevado la muestra a la competencia de cata, donde 30 catadores profesionales, a ciegas, es decir, que ninguno sabía de dónde venía, y calificamos todos los tés que se presentaron. En la categoría de té verde estaba el Té Chapare y nos dieron la noticia que obtuvimos el segundo lugar”, cuenta Pedraza, quien también fue parte del jurado calificador.
El Té Chapare es producido por Agrote, una organización de productores sin fines de lucro que se dedican principalmente a la producción, procesamiento y comercialización del cultivo de té ecológico. Cuenta con certificación ecológica y con personal capacitado de los mismos productores y ventajas del producto para la exportación.
Agrote cultivo en la zona del trópico cochabambino. La técnica de cosecha se realiza manualmente: para el té verde, brotes con dos hojas tiernas y el ápice, y para el té negro, brotes de tres hojas tiernas y el ápice.
“Lo más lindo del Té Chapare es que la plantación que tiene cuenta con 50 años. Es de un árbol de semilla, que a lo largo del tiempo va a empezar a adquirir otros sabores y otros aromas, porque mientras más viejo sea el árbol hay ciertos sabores que se van identificando con la edad”, manifiesta Pedraza.
“Tenemos una plantación mágica y la industria no recibe el apoyo que debería tener. Esperemos que la gente local lo consuma más porque es antioxidante, ayuda con la energía, te mantiene despierto, regula el colesterol, tiene muchos beneficios y lo ideal es que lo consumamos sin azúcar”, añade.