EEUU exigió ayer al primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, que mantenga el statu quo de la Explanada de las Mezquitas de Jerusalén, tras la polémica visita del titular de Seguridad Nacional, el ultraderechista Itamar Ben Gvir, a este lugar sagrado para judíos y musulmanes, reservado exclusivamente al culto de la fe islámica.