Universitario retoma el pulso del torneo con fundamental triunfo en Tarija
Universitario de Vinto se regocijó anoche con una vital y reconfortante victoria 0-2 a domicilio ante Real Tomayapo, en el duelo correspondiente a la fecha 14 del Campeonato de la División Profesional y que se desarrolló en el estadio IV Centenario.
Con este triunfo, el equipo vinteño dejó atrás una racha de cinco partidos sin ganar; el Verdolaga, por su parte, sumó su cuarto cotejo sin vencer.
De entrada, la visita se mostró con propuestas ofensivas y con jugadas que entrañaron riesgo en el arco de Pedro Galindo. Fue un presagio.
Producto de ello, la “U” se puso en ventaja a las 12 minutos de iniciadas las acciones, tras un desborde por la banda izquierda comandada por el colombiano Andrés Llano, quien enganchó hacia dentro del área rival y puso el balón en bandeja de oro para la definición de Raúl Castro (0-1).
Luis Alí (14’ PT) le ganó la espalda a los zagueros estudiantiles, mas no pudo hacerlo con el guardameta Raúl Olivares y Real Tomayapo desperdició una chance.
A los 23’ PT, un lateral jugado por Real Tomayapo acabó en el pivoteo de Agustín Graneros y el remate final de Jeffinho que Olivares contuvo de manera magistral.
En el momento de mayor asedio del elenco mendeño, la “U” gestó a los 36’ PT una contra que dejó solo a Víctor Ábrego y que el portero Galindo despejó con lo último de sus fuerzas.
El complemento se inició con un equipo local obligado a empatar y salvar la localía, pero Universitario de Vinto tuvo la capacidad de poner pausas al encuentro y abrir espacios en el campo rival.
Y fue a los 9’ ST que la “U” pegó con el 0-2, luego de una contra de Ábrego por la banda derecha y el pase preciso para Joel Calicho, quien en soledad se encargó de batir al arco tarijeño.
La polémica se dio a los 33’ ST y una injusta expulsión de Ábrego, luego de defenderse de una antideportiva y desleal acción de Juan Pablo Rioja sobre el futbolista estudiantil. Lejos de cobrar correctamente, el juez potosino Weimar Michel expulsó al atacante valluno y sólo mostró amarilla al agresor.
El local buscó afanosamente el descuento, pero el milagro no se dio. Final, 0-2.