Evo recuerda nacionalización y asegura que Bolivia vive una "rebelión"
En contacto telefónico con una radio argentina, el expresidente de Bolivia, Evo Morales, no dejó pasar la oportunidad para hablar de lo que considera uno de los hitos de su gestión el Primero de Mayo de 2006: la Nacionalización de los Hidrocarburos. El exmandatario dijo también que el pueblo “está decepcionado del gobierno de facto” y Bolivia vive una “rebelión”.
Desde el exilio brindó algunos datos sobre la nacionalización, así como de las plantas de gas licuado y congelado. Hasta el 2019, el expresidente tenía acostumbrado al país a marchar con los obreros y brindar prolongados informes en esta fecha. Ahora lo hizo de manera breve a través de ese medio de comunicación.
“Instalamos una planta de GLP (gas licuado) y luego instalamos otra. A partir de ese momento dejamos de importar y empezamos a exportar. Instalamos una planta de gas congelado (…). Y lo más importante, hemos instalado la plata de úrea en Bulo Bulo. Desde entonces ya no se importan fertilizantes, al contrario se exporta a Brasil. Ahora la han paralizado”, recordó Morales.
Asimismo, el expresidente no perdió la oportunidad de hablar sobre la situación política del país. Se refirió a las elecciones como el hecho para “recuperar la patria y la democracia”.
“El pueblo ha perdido miedo al gobierno de facto. Desde hace semanas el gobierno de facto ha perdido autoridad. El pueblo está decepcionado. Ahora hay una rebelión”, aseveró Morales.
Agradeció las muestras de cariño que recibe de residentes bolivianos en Argentina e indicó que se encuentra en constante comunicación con gente de Bolivia.
Evo Morales está refugiado en Argentina, luego de haber pasado por México tras su renuncia a la presidencia del Estado el 10 de noviembre de 2019, a raíz de los conflictos electorales y resultados cuestionados por fraude. El expresidente fue denunciado por intentar dejar sin alimento a las ciudades y tener injerencia en las decisiones políticas de la Asamblea Legislativa Plurinacional. Además de supuestamente promover actos de desestabilización del país.