¿Yuanes? ¿Es en serio?
Otra vez me cuentan que el fin de la hegemonía estadounidense es inminente. Para pasado mañana, cuando mucho. Es por eso que, afirman algunos, no vale la pena atesorar dólares, sino yuanes. ¿De dónde salen estos loquitos? Cualquier rato saldrán a decir que la Tierra es plana o que el peso argentino es una moneda en serio...
Vengo escuchando a nuestros profetas del apocalipsis desde que tengo memoria. Estos hijos opas de Marx hablan del “fin del imperio” porque así está escrito en sus libros sagrados. Claro, no se les ocurre observar el mundo real, prefieren nomás acomodar los hechos a su doctrina.
Usamos dólares no sólo por la magnitud de la economía americana, sino por la capacidad de ese país para garantizar el orden geopolítico actual y la libertad de comercio que conocemos, casi irrestricta a nivel global.
De otra manera, seguro que la gente guardaría francos suizos debajo de sus colchones, e incluso euros... Lo malo es que los suizos, que sí tienen ejército, abandonaron hace siglos cualquier afán de expansión militar. En cuanto a los europeos, no sé, les está costando vender el cuento de que la bondad y ciertos aires de superioridad moral los convierten en líderes de la humanidad.
Aconsejaría a mis amigos lo siguiente: ahorren en yuanes, si encuentran, cuando el presupuesto militar chino sea al menos igual en términos absolutos al de Estados Unidos y sus aliados. Mientras tanto, dejen por favor de creer tan ingenuamente en la propaganda del Gobierno.
Incluso me animo a hacerles una pregunta: ¿en qué moneda creen que ahorran el Presidente, sus ministros y colaboradores más cercanos? ¿En serio piensan que prefieren un billete con la efigie del compañero Mao a uno con el rostro bonachón de Franklin? Ustedes me dirán.
Columnas de ERNESTO BASCOPÉ