La ONU denuncia que en 2024 los desplazados por la guerra en Sudán subieron un 27%
Desde diciembre de 2023 hasta diciembre de 2024 los desplazados internos en Sudán a causa de la guerra entre las fuerzas paramilitares de las Fuerzas de Acción Rápida (FAR) y el Ejército regular crecieron un 27%, en lo que constituye una de las mayores crisis de desplazados del mundo.
Según un nuevo informe publicado hoy por la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) de las Naciones Unidas, el porcentaje de crecimiento de los DI en el país del noreste de África podría ser superior esa cifra, ya que muchas personas se han visto forzadas a abandonar en repetidas ocasiones las localidades en que se refugian debido a nuevos estallidos de violencia u otros problemas como inundaciones.
En este sentido, OIM asegura que únicamente 2.736.108 de los DI previos al 15 de abril de 2023 -cuando detonó el conflicto armado-, se mantuvieron en sus zonas iniciales de desplazamiento.
Según el mismo informe, las tendencias en las rutas de migración se mantuvieron estables durante el año pasado: los principales estados de origen fueron Jartum, con 3.644.334 desplazados internos (32%), Darfur del Sur (18%) y Darfur del Norte (15%), siendo estos últimos, a su vez, los estados que albergaron a la mayor cantidad de personas desplazadas.
Si bien durante el pasado noviembre y diciembre hubo cambios en la dinámica de desplazamiento debido a la intensificación de los enfrentamientos en el estado de Gezira y al aumento de los choques en toda la región de Darfur, así como en las localidades de At Tadamon y Baw.
En este sentido, solo entre el anterior 10 de noviembre y 10 de diciembre 112.960 personas (22.592 hogares) se vieron forzadas a marcharse del Estado del Nilo Azul.
Según fuentes sobre el terreno enviadas por OIM, la mayoría de las familias desplazadas (65%) tienen la intención de permanecer en su ubicación actual, principalmente debido a las mejores condiciones de seguridad (81%) y a las redes de apoyo familiares, tribales o comunitarias (17%).
Otras querrían regresar a su lugar de origen (14%) o mudarse a otro lugar (10%), frente a un 2 % que preferiría abandonar Sudán para ir a otro país.
En cambio, un 9% de los hogares de DI no están seguros de sus planes a corto o medio plazo.
Además de la guerra y la incertidumbre por el futuro, los sudaneses que aún se mantienen en el país se enfrentan a la hambruna, ya que esta sigue siendo una de las principales necesidades humanitarias en 13 de los 18 estados del país, en el que OIM estima que el 84 % de los hogares necesitan alimentos.
En este sentido, durante noviembre y diciembre de 2024, las principales necesidades entre los DI fueron: alimentos (84 %), artículos no alimentarios (78 %), atención médica (77 %), medios de vida e ingresos (77 %) y agua (67 %).