Quillacollo da tres meses para fijar nueva tasa de aseo
Los presidentes de los barrios, sindicatos y juntas vecinales de Quillacollo determinaron ayer, mediante voto resolutivo, dar un plazo de tres meses a la Alcaldía para fijar la nueva tasa de aseo de manera conjunta con la población.
Asimismo, apoyan el cierre definitivo del botadero de Cotapachi, demandado por vecinos del Distrito 6, que decidieron cerrar el ingreso por casi una semana como medida de presión. Esto provocó la acumulación de más de 700 toneladas de basura en las calles.
La representante de los vecinos, María Elena Ortiz, explicó que mediante la Ley 508/2021 se autorizaba el cobro de la tasa de aseo —que antes no se realizaba— indexada a la factura de luz. Esta norma fue observada “desde el inicio”. Con dos días de bloqueo lograron su abrogación.
Esta decisión municipal causó molestia en los vecinos de Cotapachi, en el Distrito 6, quienes apoyaban el cobro para un mejor manejo de los residuos sólidos y bloquearon el ingreso al botadero para pedir su cierre definitivo.
Para solucionar el conflicto, las autoridades y los movilizados acordaron realizar un nuevo estudio para el cobro, levantar la medida y permitir el ingreso de los carros basureros.
“Nosotros apoyamos el cierre técnico y para ello se debe tener una alternativa para un relleno sanitario. Además, se debe trabajar de manera conjunta el nuevo estudio socioeconómico, técnico y jurídico para determinar la nueva tasa de aseo en un plazo de tres meses”, sostuvo Ortiz.
En tanto, el alcalde Héctor Cartagena anunció que se invertirán más de 4 millones de bolivianos para el manejo del relleno.